La Luna, al igual que la Tierra, recibe continuamente el impacto de
objetos de distintos tamaños a gran velocidad (varias decenas de miles de
kilómetros por hora). Se trata de fragmentos que proceden fundamentalmente
de asteroides o cometas y que reciben el nombre de meteoroides. No obstante, al carecer de
atmósfera, la Luna no dispone del escudo protector que tiene nuestro planeta
y que hace que gran parte de estos objetos se desintegren antes de llegar al
suelo. Por este motivo, en el caso de la Luna hasta las partículas más
pequeñas de materia interplanetaria consiguen impactar contra su superficie.
De hecho, nuestro satélite natural se
encuentra cubierto por millones de cráteres que se han producido por el
impacto de rocas a lo largo de varios miles de millones
de años. Estos impactos también se han producido en la Tierra, si bien
distintos procesos han ido borrando la huella de la inmensa mayoría de ellos
(procesos tectónicos, erosión, etc.).
La detección de impactos de
meteoroides en la Luna permite obtener información adicional sobre el flujo
de materia interplanetaria que impacta con nuestro planeta. Esta técnica
tiene la ventaja de permitir monitorizar una región mucho mayor (la
superficie lunar) que la que se puede abarcar con los sistemas que se basan
en la detección de meteoroides en la atmósfera terrestre.
Como
continuación del estudio pionero llevado a cabo desde España en el año 1997
por el by Dr. Ortiz (ver, por ejemplo,
Ortiz et al. 1999 y
Ortiz et al. 2000), nuestro equipo
está llevando a cabo una monitorización sistemática de la región nocturna
(no iluminada) de la Luna mediante una serie de telescopios y dispositivos
CCD de alta sensibilidad (ver, por ejemplo,
Madiedo et al. 2010,
Madiedo et al. 2014,
Madiedo et al. 2015a,
Madiedo et al. 2015b). Este
proyecto se denomina MIDAS (Moon Impacts Detection and Analysis System
- Sistema de Detección y Análisis de Impactos en la Luna). En la
actualidad, el proyecto MIDAS se desarrolla desde tres observatorios
astronómicos ubicados en España: Sevilla, La Hita (Toledo) y La Sagra
(Granada). |